Aveces somos tan cobardes que no demostramos en verdad quienes somos, nos ocultamos detrás de una estúpida mascara que solo por un momento nos hace creer que tenemos éxito. Caminamos por la calle, y compramos la marca de ropa más cara. ¿para qué? ¿de que sirve?. Para que todos de asombren de una simple etiqueta. Reímos, gozamos y vivimos el ahora, el hoy... Perdiendo el tiempo hablando de los demás si ni siquiera uno mismo se conoce. Deberíamos tomarnos un tiempo de nuestra única vida, y preguntarnos si en verdad somos uno, para que servimos y para que nos sirvió el ayer. Sean felices y uno solo.